la neta me gustaria explicarlo yo, pero seria mas fusil, prefiero aceptar que hay un poder superior (Chuck Norris) y que es la mejor manera de entenderlo otra vez del Señor Luis Testiculo Tovar Elhuevo.blogspot.com
De mujeres, relaciones, aficiones, conversaciones, amigotes y el porqué no es bueno inhalar cocaína del estomago de prostitutas muertas.
Siguiendo con lo de ayer, me parece incomprensible como una relación puede llegar a la etapa en donde a uno le "den" permiso o no de hacer las cosas que le gustan. Y digo que me parece incomprensible porque siempre he supuesto que una pareja es alguien que nos comprende, nos aprecia y sobre todo, nos quiere. Y en teoría ese alguien que siente esas cosas tan bonitas debería desear nuestra felicidad. So, de nuevo, no entiendo porque ese alguien se empeña en evitar que hagamos lo que nos gusta —siempre y cuando no sea algo como inhalar cocaína del estomago de una prostituta muerta— y nos hace felices por pocas o ninguna razón en especifico.
Cuando a uno le "dan" permiso de hacer algo, se lee entre líneas algo muy, muy feo que ni siquiera tengo que explicar.
Por ejemplo, a mi y a mis amigotes nos gustan algunas cosas en particular, que a saber son:
-Juntarnos a ver películas y reírnos como idiotas.
-Juntarnos a jugar videojuegos e insultarnos como idiotas.
-Juntarnos a oír música y tomar cerveza hasta ponernos idiotas.
Son pequeños placeres inofensivos —volvamos a lo de la prostituta muerta— y hasta cierto punto, preferibles a otras aficiones —la prostituta, la prostituta...—. Pero entonces aparece la novia, amante o quimera del momento y todo se va al carajo. Porque lo que uno hacia antes sin ningún problema, de pronto se vuelve un asunto tan delicado como una negociación de rehenes.
En mis sueños guajiros, esta es la conversación perfecta entre una pareja:
-Riiiiing (o inserte aquí algún tono polifónico de mal gusto)
—Bueno, ¿Que paso?
—Oye, ¿Pasas a rentar una película y te vienes para acá?
—Mmmm, es que traigo antojo de unas cervezas y quede de pasar por el Pototos, vamos a escuchar el nuevo disco de Los Serranos de la Sierra.
—Ah bueno, pues a ver si yo consigo plan entonces.
—Ándale, o si quieres paso por ti.
—Nooo, cuando estas con aquel ni me pelas, además ya me sé de memoria todas sus conversaciones pendejas, paso.
—Bueno, entonces te veo mañana, ahí te echo un fonazo.
—Ok. Y si te pones muy pedo pides un taxi. Y no me estés mandando mensajitos calientes en la madrugada cabron, que mi sueño es sagrado.
—Ohh, todavía que pienso en ti te quejas.
—Si, nomas después de estar viendo pornotube y acabar bien caliente te acuerdas de mi.
—Jaja, ok, ok. Bueno, si te sale plan me mandas un mensaje, si estamos aburridos te caemos.
—Esta bueno. Ya, ándale, lárgate con tus amigotes y déjame sola.
—Cállate, que seguro ya le estas avisando a tus amigotas.
—Brujo. Bueno, te cuidas, te amo *smuak* *smuak*
—Te amo, órale, juchale.
Clic.
¿Es mucho pedir? Sinceramente no lo creo. Solo se necesita que los dos tengan un poquito de cerebro, sentido común, comunicación, confianza y sobre todo, que entiendan que esa creencia adolescente de que una pareja tiene que hacer todo juntos y estar todo el tiempo a no más de tres metros de distancia uno del otro —o de lo contrario su amor no es el mas grande de la historia—, es una pendejada irracional, dañina y suicida para una relación sana.
(Todo el que ha tenido conversaciones —y por ende, relaciones— así, sabe de la paz mental, tranquilidad y lo completo que uno se puede llegar a sentir; todo lo contrario a lo que se siente cuando una mujer quiere retenernos a fuerza de apretar mas el nudo corredizo de los berrinches, desplantes y sinsentidos infantiles)
Y para rematar, mujeres, nunca, nunca se interpongan entre su hombre y sus amigotes. Porque a menos que en verdad sean unas supermujeres mutantes biónicas, jamás podrán darle a su pareja la retroalimentación tan necesaria que solo los amigotes pueden brindar. Si sus amigos les cagan, mantengan su distancia. No mezclen sus pedos de pareja con las amistades. No culpen a terceros de lo que hace su pareja, que por muy idiota que sea, ya esta grandecito y nadie lo obliga a hacer nada que no quiera hacer. Y por favor, sean amables, nada les cuesta, porque cuando llegue el momento en que su relación entre en supernova para luego explotar hecha añicos (porque ese momento siempre, siempre, mas tarde o mas temprano, llega) y su hombre llegue con sus amigotes a dar la notica, estos pueden decir: "Uts, ya era hora cabron, vamos a ponernos bien pedos para celebrar" o bien: "Si serás pendejo. No mames. Ve y habla con ella, estúpido, es la única vieja que has tenido que vale la pena".
De ustedes depende.
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