IVI

Jay se pego a un pilar respirando agitadamente mientras recargaba su pistola, portaba unos lentes "de piloto" que se quito enseguida, coloco habil y rapidamente en la bolsa de su camisa cafe, su pantalon de vestir estaba ligeramente sucio y roto por un costado contrastaba con sus zapatos tenis que marcaba en un extremo "adi as" por el desgaste.

se preguntaba como habia llegado a esto, pero le importaba mas como iba a salir. el hecho de que estuviera a mitad de una balacera con un viejo amigo le tenia sin cuidado, asi que comenzo a jugar un poco.

-sabes!!!???-grito ofuscado
-ehh?-exclamo sorprendido su agresor
-creo que por fin la encontre-
-en serio???- respondio aunque su voz se quedo en casi un susurro
-sabes que no jugaria con eso-

entonces se oyo un golpe seco y un arma salio arrastrada hasta la mitad del taller, a la vista de ambos.

-y eso?- exclamo jay
-una muestra de buena voluntad-
-hombre mira que generoso-
-seremos unos asesinos, ladrones, hampones de poca monta, pero ante todo somos unos caballeros, o no?-

entonces jay siguio a sus instintos y avento su arma junto a la otra muy cerca de la otra, cualquier niño habria dicho que estaban jugando canicas y jay habia traido su "bombocha" -el arma era realmente grande-.

-hombre que puedo decir ... felicidades- exclamo su interlocutor al tiempo que salia de las sombras con los brazos bien abiertos en señal de estar desarmado
-pues... gracias, Tai-dijo jay al tiempo que hacia lo mismo

ambos hombres bastante golpeados y sucios se daban un fraternal abrazo, ambos sabian que seguramente seria la ultima vez.

-me encantaria que me dijeras como paso- pregunto Tai bastante pensativo
-no creo que haya mucho tiempo, me encantaria quedarme a charlar pero se que no me vas a dejar ir vivo y esas balas no te van a entrar solitas-
-si me gustaria que pudiese ser de otra manera-
-pero no hay otra jodida manera-penso Jay para sus adentros
-bueno pero dejemos las cosas tristes, vos tenes algo porque seguir vivo y me alegro por vos. pero sabes que aunque quisiera solo vas a poder iros sobre el cadaver de un servidor-
-vamos a darle entonces- dijo Jay sin ningun pensamiento en particular
-bueno te dare un regalo de bodas- dijo Tai con una amplia sonrisa en el rostro
-de que se trata??-
-luchemos como en la oldschool asi no les diras que fue solo suerte-

ambos amigos se quitaron sus pesados sacos y al tiempo que Jay saltaba con el puño hacia adelante solo grito:
-que asi sea entonces-